Por ANDRÉS TAPIA // Fotografía: GETTY IMAGES

En la geometría euclidiana un teorema reza que “la distancia más corta entre dos puntos es una línea recta”. A partir de una simple asociación de ideas, la memoria de los seres humanos debería operar bajo este axioma perfilado por Euclides. Los recuerdos, sin embargo, suelen encadenarse de una manera extraña en la que un atajo no significa necesariamente un sendero más corto, sino un largo y accidentado camino que debe recorrerse para llegar a un instante que en apariencia se ha perdido en el tiempo.

Cuando era niño tuve un amigo llamado Fernando. Estudiamos juntos en las escuelas primaria y secundaria y, luego de ello, pese a lo cercano y entrañable de nuestra relación, cada uno siguió su camino luego de haber permanecido en contacto estrecho por espacio de nueve años.

Por ANDRÉS TAPIA // Fotografía JOHN COOLEY

Conduzco de regreso a casa.

Estela de Carlotto, la presidenta de la asociación de las Abuelas de la Plaza de Mayo, habla en la radio y recuerda –con su dulcísima voz de abuela– cómo fue que logró encontrar al hijo de su hija Laura Estela, secuestrada y desaparecida el año 1977 en Buenos Aires. Casi treinta y seis años de búsqueda para descubrir que un hombre llamado Ignacio Hurban, quien es director y profesor de la Escuela Municipal de Música Hermanos Rossi, es su nieto. Alejandro Franco, un viejo y adorable conocido mío, entrevista a la abuela De Carlotto para W Radio. Ellos están en la mítica Buenos Aires. Yo en la Ciudad de México con su tráfico infernal de siempre.